sábado, 4 de enero de 2014

Reivindicándome con Blanca nieves.

(A Mich, cómplice de la reconciliación)
Hace rato que estaba por escribir esto. Desde que releí mi escrito anterior sobre Blanca Nieves he querido, sin ánimo de retractarme o justificarme, reconocer muchas cosas de esta película. Fui un poco cruel con BN en ese escrito de septiembre, al que titulé "Blanca Nieves la ingrata", aunque creo que es injusto que no se reconozca demasiado a los enanos y a los animales, pero bueno, hay otras cosas para resaltar también. Darle un poco de chucho con Mich a la peli, me ha servido para también buscar luego información seria, y me encantó saber nuevas cosas, y ver el making off de gente que tuvo que ver con todo el proceso. Blanca Nieves fue el primer largometraje de animación, en 1937. Pero eso mismo implicó que fuera una locura. De hecho los mismos que trabajaban con Walt Disney nunca le llamaron "Blanca Nieves" sino "La locura de Disney!". Es que también la animación hasta ese momento no tenía para nada importancia, solo servía para rellenar la programación en el cine antes de las película. Nadie pensó que sería interesante ni productivo un largometraje de animación. Además de que la idea de Disney llevaba técnicas diferentes de animación, hasta el momento no usadas y complejas. Incluso el príncipe tenía muchísimas más escenas en el guión original que tuvieron que ser suprimidas porque no quedó muy bien en cuestiones de animación (el pobre..). De hecho el dinero no alcanzó para terminar la película; Bank of America le prestó después a Disney cierta cantidad para poder concluirla y estrenarla. WD fue súper perseverante para lograr y llevar a cabo su "sueño" y es algo en lo que siempre apostó en cada película, ese tema recurrente de que los sueños se pueden cumplir, pase lo que pase, si uno apuesta por ellos. Y es Blanca Nieves el inicio de ese ciclo de películas, de un estilo que quedó y de un imperio que es ahora Disney. Diría mucho más sobre Blanca Nieves pero igual exhorto a que siempre se busque que hay más allá de todo lo que veamos, aunque sea una película que creamos para niños. 
Quiero concluir compartiendo uno de los temas musicales de esta película. La música en las películas de Disney también ha ayudado para crear todo un arsenal entonativo en generaciones y ha conformado en gran parte toda esa magia de Disney. Este tema, que es el que canta Blanca Nieves a los enanos platicándole de su sueño de estar con su príncipe, se convirtió luego en un clásico de jazz. Aquí se los comparto en mi versión preferida de uno de los discos de Miles Davis. 




                       


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